El Partido Socialista de Euskadi (PSE) y el conservador Partido Popular (PP) alcanzaron ayer un preacuerdo para la constitución del nuevo gobierno del País Vasco, con el socialista Patxi López (foto) al frente. Si ese preacuerdo se concreta, sería la primera vez en treinta años que esa comunidad autónoma del norte de España no será gobernada por el partido nacionalista. El PP, el principal partido de la oposición a nivel nacional, presidirá el Parlamento regional, según el preacuerdo alcanzado. La decisión fue comunicada por el socialista Rodolfo Ares, tras una reunión de representantes de ambos partidos. Los socialistas vascos lograron 25 escaños en las elecciones autonómicas celebradas el pasado 1º de marzo, mientras que el Partido Popular obtuvo 13. La suma de ambas fuerzas le permitió a López convertirse en el próximo lehendakari (presidente regional). El Partido Nacionalista Vasco (PNV), que gobernó esa región durante las últimas tres décadas, fue la fuerza política más votada en los comicios del 1º de marzo. Consiguió sumar 30 diputados, alcanzando la primera minoría. Sin embargo, los nacionalistas, acostumbrados a gobernar solos, no estaban dispuestos a formar una alianza con algunos de los partidos nacionales, el PSOE y el PP. A pesar de ello, el dirigente socialista vasco Ares adelantó que el futuro gobierno de Patxi López mantendrá una “relación preferente” con el PP, pero que estará abierto a realizar acuerdos con las otras fuerzas políticas de la región según los temas que se discutan.