El presidente uruguayo, José “Pepe” Mujica, sigue su gira por Latinoamérica. Tras las reuniones que mantuvo en días pasados con sus homólogos, Luiz Inácio Lula Da Silva en Brasil y Evo Morales en Bolivia, el mandatario arribó a Caracas con un objetivo claro: fortalecer las relaciones bilaterales con Venezuela mediante la firma de nuevos acuerdos en materia energética y comercial. En la tarde de ayer, el flamante presidente uruguayo se entrevistó con su par Hugo Chávez en el palacio presidencial de Miraflores, para luego proceder a la firma de ocho convenios de intercambio estratégico en diferentes áreas con el gobierno venezolano.

“Queridos compatriotas, en el sentido más amplio, y al presidente Hugo Chavez en especial: yo no tengo otras palabras que decirles más que gracias”, expresó sonriente Mujica en rueda de prensa tras la concreción de varios acuerdos entre ambas dirigencias concernientes al sector agrícola, industrial y tecnológico. Entre lo pactado hay varios acuerdos de cooperación en materia de seguridad y soberanía alimentaria, pero el punto clave de las negociaciones pasó por la reedición de la venta de petróleo venezolano a Uruguay.

“Vamos a renovar el Acuerdo Energético de Caracas, para que Uruguay disponga de hasta 40.000 barriles diarios de crudo venezolano”, señaló el presidente Chávez, al tiempo que anunció la firma de un memorando de entendimiento entre la estatal uruguaya Administración Nacional de Combustibles, Alcohol y Portland (Ancap) y su contraparte Petróleos de Venezuela (Pdvsa).

Desde el año 2005, Uruguay mantiene un acuerdo con Venezuela que le permite comprar petróleo con facilidades de financiamiento del 25 por ciento del costo, a una tasa de interés del dos por ciento anual. La deuda que mantiene el país de la banda oriental por la compra de crudo a Venezuela es de 524 millones de dólares.

“Pepe me decía que está empezando a explorar para buscar gas. Pero sabes que si no lo consiguieras, todo el gas, todo el petróleo que necesitas para este siglo, está aquí, en Venezuela”, bromeó Chavez.

La primera visita oficial del presidente uruguayo fue recibida con algarabía por la dirigencia chavista. Distendidos, ambos mandatarios abogaron por la unidad latinoamericana y el mejoramiento en la calidad de vida de ambos pueblos. “Ahora, con la visita de Pepe, tenemos que renovar para que Venezuela vuelva a ser un país productor de alimentos, siguiendo su ejemplo”, dijo Chavez con admiración. Y agregó: “Para poder vivir en libertad tenemos que consolidar la unidad de América latina y el Caribe, no nos queda sino apurar el paso y afinar la brújula”.

Mujica arribó este martes a Caracas, acompañado de una comitiva oficial integrada por el canciller Luis Almagro; el ministro de Industria, Roberto Kreimerman, y el presidente de la Ancap, Germán Riet, entre otros. Tras su llegada a la capital caraqueña, el ex líder tupamaro habló sobre los lazos de solidaridad que unen a ambos países.

“Yo no me puedo olvidar jamás de la solidaridad de Venezuela, su pueblo y su gobierno. Soy bastante viejo, pero no tengo memoria de que en América latina alguien haya tenido tanto compromiso y tanta generosidad para con nosotros como Venezuela”, expresó Mujica en una cena realizada en la noche del martes en el Club Uruguayo de Caracas. “Ningún gobierno ha tenido la solidaridad y la aceptación que hemos tenido en este país”, dijo el presidente sobre la dirigencia chavista.

Durante la velada, el mandatario hizo un llamado a la unidad latinoamericana. “El camino al de-sarrollo regional es largo y fatigoso. Nada empieza con nosotros y nada termina con nosotros”, señaló Mujica. Y agregó: “Somos parte de una América latina descoyuntada. La obra de la libertad ya fue enganchada con el mercado mundial. Cada capital, cada puerto, es una patria. No pudimos, tal vez, hacer una patria común. Todavía es una deuda con todos los latinoamericanos”, apuntó.

Mujica inició su primer acto oficial en la mañana de ayer, con la visita al sarcófago del Libertador Simón Bolívar en Caracas, donde colocó una ofrenda floral a modo de tributo. Escoltado por el vicepresidente venezolano, Elías Jaua, y los ministros de Relaciones Exteriores y del Interior, Nicolás Maduro y Tarek El Aissami, respectivamente, recibió el pergamino de “ciudadano ilustre” de manos de la jefa administrativa de la capital, Jacqueline Farías, y las “llaves de la ciudad” de parte del alcalde del municipio caraqueño de Libertador, Jorge Rodríguez.