Como un mojón en el camino al 2007, el ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, mantuvo ayer una reunión en el Hotel Sheraton con la conducción del radicalismo y los diputados del grupo El General para avanzar en “la búsqueda de entendimientos y coincidencias”. Así lo definió el titular de la UCR, Roberto Iglesias, quien aseguró que “no hemos hablado de candidaturas”. Sin embargo, aseguró que en la reunión “se plantearon las realidades positivas que tiene el país y procuramos ver cómo encontramos el camino”. En concreto, se mencionó la posibilidad de una coalición o un frente que aglutine a los radicales, los ex duhaldistas y al socialismo, pero Iglesias remarcó: “No sé lo que va a hacer Lavagna”. Lo que quedó en claro es que un sector del radicalismo ya se lanzó en esa dirección.

El encuentro en el hotel de Retiro comenzó ayer a las 16 y duró dos horas. Por la UCR participaron Iglesias, el diputado Angel Rozas, el titular de la bancada radical en el Senado, Ernesto Sanz; su par en Diputados, Fernando Chironi; el presidente de la Convención Nacional de la UCR, Adolfo Stubrin, y –por el duhaldismo residual– los diputados Eduardo Camaño, Juan José Alvarez, Francisco De Narváez y Jorge Sarghini. “No vamos detrás del duhaldismo sino que buscamos coincidencias con todos los sectores”, se atajó Iglesias, que definió a Lavagna como “un ex ministro de Economía, precursor del programa económico actual”. “Fue una reunión de dirigentes de distintas fuerzas, que es lo razonable en una democracia”, minimizó el titular del Comité Nacional.

“Lavagna siente que puede tener un protagonismo importante en el país, pero planteó que de ahí a una candidatura hay un trecho todavía muy largo. A él le gustaría que se sumara a esta alternativa la UCR, un sector del PJ y los socialistas”, detalló Sanz, quien aseguró que no se discutió ninguna estrategia electoral en esta primera reunión. En principio, los dirigentes radicales que participaron del encuentro buscarán que se apruebe esta postura en el encuentro del Comité Federal de la UCR, que se hará el 20 de junio. “Nuestro partido tiene que tener un pensamiento propio, más allá de quién sea el candidato”, destacó Iglesias.

Radicales K, L o XL

La (supuestamente hipotética) candidatura de Lavagna también divide las aguas en el radicalismo. El ex presidente Raúl Alfonsín fue, hasta ahora, el mayor entusiasta de esa posibilidad, que también apoyan los dirigentes Federico Storani, Leopoldo Moreau y Jesús Rodríguez. “Por ahí hoy los partidos no tenemos el hombre, de modo que se da una conjunción ideal. Vamos a resolver esos problemas con el llamado radicalismo K. Lavagna va a contener mucho”, sostuvo ayer en una explosión de optimismo. A esta postura se sumó rápidamente Iglesias, quien encabezó ayer un acto junto a Alfonsín y Rozas, en el que presentó la nueva sede de la fundación Leandro Alem y la revista la causa. La portada del primer número pareció una clara advertencia a los gobernadores radicales. “Sumisión o dignidad. Dispersión o convergencia”, titularon.

Los gobernadores, liderados por el mendocino Julio Cobos, coquetean con la posibilidad de una coalición con el kirchnerismo. “Es prematuro hablar de candidaturas”, advirtió ayer Cobos. “Quiero una conducción que trate de representar a la mayoría porque si no, vamos a seguir divididos”, afirmó. “Aquí nadie tiene una verdad absoluta. No la tiene Cobos, no la tendrá Iglesias. Debemos tener en cuenta la opinión de todos los sectores y en eso veo que la conducción está muy alejada”, fustigó el gobernador al culminar un acto por el día del medio ambiente en Mendoza.

“Hay intendentes o gobernadores que no tienen segundas intenciones, pero otros están buscando un futuro personal”, devolvió Iglesias, quien aseguró que “al radicalismo lo quieren confundir y algunos se apresuran a hacer alianzas y entreveros electorales”. “No coincidimos con la metodología ni el pensamiento atropellado y hegemónico de Kirchner, ni con la oportunidad que está desperdiciando el Presidente”, sostuvo.

Por su parte, la secretaria general de la UCR, Margarita Stolbizer, no se muestra partidaria ni de una opción ni de la otra. “Lavagna no va a ser un candidato del radicalismo, a lo sumo podrá ser la figura de una coalición, pero no es una opción que comparta. Necesitamos construir una alternativa que desenmascare el falso progresismo del Gobierno”, planteó.

Informe: Werner Pertot.