En el largo camino de protesta por la instalación de la pastera Botnia en la orilla oriental del río Uruguay, los vecinos de Gualeguaychú y de Colón cortaron los accesos al país vecino una vez más. No pudieron sumárseles, sin embargo, los ambientalistas de Concordia, la tercera ciudad entrerriana que tiene un puente internacional que comunica con la costa oriental. En esa ciudad, los manifestantes resolvieron no bloquear el puente dado que existía una orden judicial que indicaba a la Gendarmería que debía desalojar el corte.

La asambleísta de Concordia Virginia Gatti detalló que resolvieron “no exponer” a los vecinos a la posibilidad de un desalojo, ya que –según informó– existía una orden del juez federal Guillermo Cuadrini de impedir el bloqueo. “La Constitución garantiza el derecho de manifestarse”, indicó, de todas formas, Gatti.

“La mayoría decidió no hacerlo y en cambio resolvió viajar a Gualeguaychú a participar de una asamblea binacional con asambleístas de Uruguay”, indicó uno de los ambientalistas de Gualeguaychú, José Pouler.

En esa ciudad, el corte permanente se mantiene sobre la ruta 136, y se sumó como otras veces el de la 135, que hicieron los vecinos de Colón. El segundo corte se extenderá hasta hoy a las 19.

La Asamblea Ciudadana de Gualeguaychú convocó a participar a los vecinos del corte de la ruta 14, a la altura del kilómetro 52, que harán mañana a las 14, para reclamar al Gobierno nacional que tome medidas concretas por la “violación del tratado del río Uruguay”.

También demandan la sanción nacional de la ley de la madera –que ya existe en Entre Ríos e impide la exportación de madera a Uruguay si tiene como destino final la pastera– y que “Prefectura nacional impida el arribo de barcos al puerto de Botnia”. También reclaman por una serie de casos de intoxicación ocurridos en la provincia y por el accidente ocurrido en Botnia, que derramó un químico (sulfuro de sodio) y debió hospitalizar a una decena de sus trabajadores.