La relocalización de la pastera española ENCE ya tiene sus primeros apoyos uruguayos. Walter Zimmer, intendente del departamento de Colonia, Uruguay, afirmó ayer que “en principio” apoyaba la medida, ya que el lugar elegido está dentro de la región que gestiona, aunque aclaró que “todavía no se tomaron decisiones, porque restan concluir los estudios de impacto ambiental”.

Zimmer destacó que el martes último mantuvo una entrevista con ejecutivos de la pastera española, quienes le mostraron el anteproyecto de la planta, y le anunciaron que ya habían adquirido 500 hectáreas en la zona donde se instalaría la pastera. El funcionario oriental afirmó que en los planes de la compañía estaba proyectado el inicio de las obras de construcción para mediados de 2007, y así comenzar a funcionar en 2009. El nuevo proyecto contempla la duplicación de la producción que tenían prevista para Fray Bentos, ya que planean producir un millón de toneladas de pasta de celulosa al año, para lo que necesitaría una inversión de 1250 millones dólares.

Dos regiones son las que barajaban los directivos de ENCE para instalar la pastera, Punta Pereira o Punta Francesa, y, aunque con menos chances, la localidad de Juan Lacase. Punta Pereira está situada a cincuenta kilómetros de Colonia del Sacramento, a sesenta de Carmelo y a 250 al sudoeste de Fray Bentos, lugar original en el que estaba diseñado su emplazamiento.

El intendente destacó en declaraciones a Radio Rivadavia que el lugar carecía de una estructura forestal y turística, porque la ganadería y la producción de leche son sus principales actividades productivas, pero que igualmente el análisis de impacto ambiental había arrojado una respuesta favorable para el emplazamiento en la zona.

“Gran parte de la ciudad de Buenos Aires está hecha de pedregullo y arena de esa cantera”, aseveró Zimmer a Radio Rivadavia al comentar que lo que generaba mayores expectativas era la reutilización de una antigua cantera de piedra y arena, cerrada hace años por agotamiento. A su vez estimó que, según resultados revelados por computadora, “hay cero impacto” en la polución visual que generaría la obra, pero advirtió que aún se deben realizar los estudios del Ministerio de Medio Ambiente uruguayo, y que el presidente Tabaré Vázquez había advertido durante la semana que todavía no se había aprobado la relocalización de la papelera, cuya suerte dependía de una decisión suya.

A través de los medios de prensa del Uruguay, ENCE comunicó al gobierno de Vázquez que la selección del lugar se había hecho tras encontrar que estaba lejos de núcleos urbanos, poseía un buen caudal de agua y disponía también de una buena orientación de los vientos dominantes.