Desde Rosario

El nivel de las aguas del arroyo Ludueña descendió ayer 93 centímetros, según indicó el jefe local de Defensa Civil Marcos Escajadillo. El secretario de Promoción Social, Pedro Pavicich, confirmó que los evacuados bajaron a 2758, con lo que más de mil personas abandonaron ayer los centros de evacuación. Fue encontrado otro cadáver en la casilla que las aguas derrumbaron en la barranca, a la altura de Moreno, y se sigue buscando el cuerpo de una joven, que sería la tercera víctima en la tragedia. El intendente Miguel Lifschitz pronosticó un panorama más “alentador” y adelantó la necesidad de “ir programando el retorno de los evacuados a sus hogares”. No bien dejó de llover surgieron por lo menos tres cortes de calles en Rosario reclamando asistencia. Anoche había todavía protestas en Ovidio Lagos al 8200, Uriburu y bulevar Avellaneda, y Garibaldi y Avellaneda.

Ayer el intendente se pudo dar el gusto de ser optimista: “Hoy tenemos un panorama más estable y con una perspectiva más optimista de la que teníamos en la tarde del viernes, porque el nivel del arroyo Ludueña comenzó a estabilizarse a última hora y durante la madrugada del sábado descendió una cantidad apreciable en su altura”, apuntó. No obstante, el funcionario expresó que “vamos a seguir atentos a cualquier contingencia que pudiera producirse en materia de pronóstico climático, aunque todo indicaría, a pesar de que está hoy (por el sábado) inestable, que mañana ya podría estar mejorando”.

Promoción Social especificó que los evacuados en la ciudad bajaron a 2758 aunque “estas cifras se modifican permanentemente porque entre un relevamiento y otro, mucha gente sigue volviendo a sus hogares por voluntad propia”. La cifra había llegado a casi 4000. Esto quiere decir que más de mil personas volvieron a sus hogares o decidieron abandonar por propia voluntad los siete centros de evacuación que funcionan en Rosario y Funes: en el Batallón de Comunicaciones 121, en el estadio cubierto de Newell’s Old Boys y el del Club Atlético Provincial y en las instalaciones del Club Náutico Avellaneda había ayer por la tarde 2358 evacuados. En tanto en el gimnasio de la Universidad Nacional de Rosario, el Liceo Aeronáutico de Funes y el camping del Sindicato de Luz y Fuerza, centros coordinados por la provincia se alojaban unas personas.

En la víspera hubo un relevamiento conjunto entre la Secretaría de Salud de la Municipalidad y la Dirección Nacional de Emergencia Sanitaria (Dinesa) y se pudo comprobar que la gente estaba en buenas condiciones, afirmaron las autoridades municipales.

Con respecto a los barrios más afectados, Marcos Escajadillo recordó que “los de la zona norte y noreste, como Nuevo Alberdi, Cristalería, Stella Maris, son los que más problemas tienen. Después hay otros barrios en los que estamos trabajando intensamente y en zonas como El Mangrullo, en zona sur, el peligro disminuyó sensiblemente”.

En este sentido acotó que “en la zona de Nuevo Alberdi un bote con motor de Prefectura Naval debió asistir a un hombre que presentaba una herida cortante y fue trasladado a un centro asistencial de la zona”.

La información sobre la bajante del Ludueña ya había sido anunciada por el director de Hidráulica de la Municipalidad, Alberto Daniele, quien indicó que “la creciente que se esperaba no llegó y por suerte ha bajado considerablemente el nivel del arroyo”.

Con respecto al nivel de las aguas del arroyo Ludueña, tal cual habían advertido desde Hidráulica de la Municipalidad, y pese a su bajante, el problema estaría dado por las aguas que escurren desde los campos.