“La idea del Centro Cultural de la Comunidad Mapuche Vera, en la base del cerro Chapelco, se desarrolló en el marco de un conflicto por tierras ancestrales, que esa comunidad había sostenido en 2008 –recordó Raúl Pont Lezica, secretario de Turismo y Desarrollo Económico de la Municipalidad de San Martín de los Andes, Neuquén–: entonces habían hecho una ‘ramada’ tradicional en la base del cerro. Para saldar el conflicto se les reconoció la tierra, que ahora está en proceso de escrituración, y se planteó crear el Centro Cultural, aprovechando que, en la temporada de esquí, hasta cinco mil personas por día estacionan y comen en la base del cerro. El Centro incluye dos octógonos, figura que tiene que ver con la cosmovisión mapuche: uno de ellos es un centro de interpretación gráfica sobre la cultura y la historia de esa nación, que incluye la venta de artesanías y productos vinculados. En el otro octógono hay un restaurante, en el que se rescata la comida mapuche, pero también se ofrece parrilla tradicional, para hacerlo atractivo para el turista y darle sustentabilidad económica. El Centro Cultural, que se inauguró en noviembre pasado, se gestó por consenso con la comisión directiva de la Comunidad Mapuche Vera.”

Pont Lezica expuso en el IV Curso Taller Internacional Turismo Comunitario, organizado por el Area de Turismo Rural de la Facultad de Agronomía (UBA). Ernesto Barrera, director del área, comentó que “en la Argentina, el turismo rural se desarrolló sobre todo cerca de los grandes mercados, de los cuales el principal es la ciudad de Buenos Aires: un ejemplo es la comparación entre San Antonio de Areco y Carmen de Areco, localidades que están una junto a la otra, sobre tierras de similar aptitud productiva: San Antonio tiene una capacidad de creación de empleo muchísimo más alta, como consecuencia del turismo”.