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De esta manera, los dos dirigentes, quienes el 28 de junio del año pasado junto a Felipe Solá se aliaron en los comicios legislativos y lograron derrotar a Néstor Kirchner en la provincia de Buenos Aires, volvieron a cruzarse y dejaron en evidencia sus diferencias.

"Yo no participo ni opino sobre internas de otros partidos, estoy en el PRO", sostuvo Macri minutos después de que el diputado del Peronismo Federal advirtiera que el jefe comunal debe presentarse a comicios partidarios si quiere ser candidato, ya que "nadie puede venir con coronita".

En declaraciones en la Plaza de Mayo, donde encabezó el acto de jura a la bandera nacional de la primera promoción de efectivos de la Policía Metropolitana, Macri se mostró molesto por las consultas de la prensa sobre el tema y enfatizó: "Estoy trabajando para eso, llevando una propuesta del PRO a todo el país y nos está yendo muy bien, estamos creciendo"

Luego, en diálogo con medios radiales, el jefe de la ciudad de Buenos Aires manifestó que "la gente tiene ambiciones personales y hay que respetarlas", en una clara referencia a De Narváez.

"Tanto él (por De Narváez) como Felipe (Solá) eligieron rumbos individuales para ver dónde llegaban sus proyectos personales, mientras que nosotros seguimos trabajando en la provincia y a nivel nacional".

Al respecto, Macri añadió: "Cada uno fue para su lado, no está bueno, pero yo mantuve la coherencia. Yo convoqué a dos personas para que sumemos esfuerzos en ponerle un límite a Néstor Kirchner y nos fue muy bien. Yo no cambié".

Por su parte, De Narváez consideró que Macri tiene "un rol muy importante", aunque "complementario", y opinó que el PRO "en la Capital Federal está yendo a una discusión interna absolutamente válida".

"Si (Macri) comienza una carrera presidencial yo creo que hay voluntad de una parte del justicialismo de que él sea parte de un frente electoral, pero también tendrá que decidirse dentro de la interna, es decir acá nadie puede venir con coronita para ponerlo de alguna forma, todos los que quieran competir tendrán que ir a una interna", recalcó De Narváez en declaraciones radiales.

El diputado puntualizó: "Macri divide las opiniones, debo ser sincero con esto, pero también creo que todavía va a pasar mucho agua bajo el puente". "Me parece que las buenas relaciones hay que mantenerlas pero por hoy yo estoy trabajando en la consolidación de un frente que tenga por eje al justicialismo", finalizó De Narváez.

En junio último, ambos ya habían protagonizado una pelea cuando el diputado calificó al jefe del Gobierno porteño de "bipolar" por su supuesta indefinición política, de ser "derechoso" e incluso de querer "usar" al peronismo con fines electorales. Sin embargo, un día después De Narváez le pidió disculpas a Macri por sus dichos.