Desde Bahía Blanca

Para esta temporada, la Asociación de Clubes autorizó que la octava ficha de cada plantel pueda ser utilizada por un sexto jugador argentino o un tercer refuerzo extranjero. Esa medida motivó polémicas, aunque finalmente se puso en práctica. Sin embargo, casi ninguno de los equipos candidatos se decidió por esa posibilidad. De los cuatro participantes del cuadrangular final de la Copa Argentina, más Libertad y Regatas, los otros dos favoritos en el arranque de la Liga Nacional, sólo Quimsa optó por esa chance. Su entrenador, Fernando Duró, le contó a PáginaI12 las ventajas y desventajas que supone esa decisión y cómo se debe adaptar a la resolución de los dirigentes, pese a que en su pensamiento lo ideal sería utilizar a dos foráneos.

“Siempre consideré que está liga se debe jugar con dos extranjeros. Es una liga de desarrollo de jugadores. Pero respeto la decisión de los dirigentes que me contratan y me adapto a ella”, comentó Duró. Jugar con un tercer extranjero está considerado peligroso, ya que el armado del conjunto depende demasiado de esos refuerzos. Factores como la adaptación al país, a la liga y al rol en la rotación del equipo generan cierto temor, sobre todo si no se trata de jugadores conocidos. Por eso, ésa fue la fórmula que intentó llevar a cabo Duró para minimizar los riesgos.

“Buscamos jugadores conocidos, con pasado en la liga como Maxey y Moore. Y con Herb Courtney tuvimos una suerte increíble. Se adaptó rapidísimo a la liga y a lo que queremos, así que estamos muy contentos. Creemos que van a ser los tres extranjeros para toda la liga”, aseguró el entrenador, campeón con Gimnasia de Comodoro en la temporada 2005/2006 con un esquema de dos extranjeros y dos nacionalizados. “Fue una experiencia parecida a ésta”, recordó el ex DT de Obras.

Otro aspecto a tener en cuenta es que Quimsa tiene tres jugadores nacionales determinantes, como Jonatan Treise, Julio Mázzaro y Gabriel Mikulas, por lo que uno de los extranjeros debería arrancar como suplente, una situación que puede ser conflictiva. “Es un problema encontrar un americano que se adapte a ese rol. A la mayoría le interesa sus números”, remarcó Duró, aunque aclaró que la posición ya está aclarada con Courtney, en principio el elegido como sexto hombre. “Ya sabe en las condiciones que vino. Es joven, es su primera experiencia fuera de Estados Unidos y es más fácil manejarlo. Con un jugador más experimentado sería más difícil”, admitió el ex ayudante de Rubén Magnano en el equipo olímpico.

Para complicar más el panorama y entender por qué otros equipos candidatos como Libertad, Boca o Peñarol apostaron a sólo dos extranjeros se suman los torneos internacionales, que se juegan con una reglamentación diferente, en la que el tercer foráneo no está permitido. De ahí a que Duró ya sepa que a uno de sus jugadores no lo podrá tener en cuenta para la Copa Sudamericana. “Ya lo sabemos y en su momento lo decidiremos. Para Santiago del Estero es una oportunidad histórica, así que vamos a pensarlo bien y resolver”, comentó Duró. Lo cierto es que además de Quimsa, sólo Independiente de Neuquén, El Nacional, Lanús y Olímpico de La Banda utilizarán tres extranjeros. Además, se supone que Estudiantes de Bahía Blanca también se incorporará al grupo, aunque por ahora el entrenador Marcelo Richotti se tiene que conformar con dos. Las intenciones de los cinco son mantener la categoría y sumar a un tercer americano tuvo más que ver con cuestiones económicas que beneficios deportivos. Habrá que ver qué sucede con el correr de la competencia, para saber qué equipo acertó y cuál se equivocó en la elección de la estrategia.