Francisco Ríos Seoane es un hombre demasiado bien cuidado y, pese a las enfermedades que lo afectan, parece llevar la vida de un paciente ambulatorio. Residente VIP del Complejo Cohabitam Asist Hotel dirigido por el doctor León Litwak y la licenciada Mirta Ungierowicz, su demencia vascular, trastorno bipolar, diabetes, hipertensión arterial y talasemia minor no le impiden salir tres veces por semana a supervisar sus inversiones gastronómicas y tampoco hacer alguno que otro viaje por Europa acompañado por una comitiva de parientes, profesionales médicos y hasta un chofer que también oficia de custodio. PáginaI12 ya había informado en su edición del 3 de agosto pasado sobre las habladurías que generaban sus problemas psiquiátricos –señalados como una coartada para zafar de varias causas judiciales por un abogado que lo denunció– y ahora vuelve sobre la situación de este controvertido ex dirigente de fútbol.

¿Cómo es posible que Ríos Seoane, de quien un médico forense que lo revisó dijo que presentaba “indicadores psicológicos de peligrosidad”, pueda hacer un tour por España tiempo después? En efecto, entre el 3 y el 13 de mayo del año pasado, el ex presidente del quebrado Deportivo Español (hoy Social Español) viajó a su país de origen acompañado por su esposa, Silvia Freijo Varela, la psiquiatra Eugenia Dabi, la endocrinóloga Gabriela Tosi, la asistente de Cohabitam Griselda Barrientos y su histórico chofer, Fernando Loureiro, un hombre de armas llevar. El grupo pasó por Madrid y el pueblo de Ordes, en Galicia, donde nació el paciente. Para Ríos Seoane, el objetivo de ese viaje había sido asistir a la fiesta de quince años de su nieta y de paso echarle un vistazo al negocio familiar en la empresa textil Viriato.

Los intereses comerciales del abuelo con prontuario que reside en Cohabitam desde el 31 de julio de 2001 también están en Buenos Aires. Con 56 años de residencia en la Argentina, el emporio de bares y confiterías que aún controla le demanda salir de la residencia geriátrica tres días a la semana.

Los martes, jueves y sábados entre las 11.30 y las 14, Ríos Seoane visita La Perla de Flores, el Duero de Santa Fe y Pueyrredón, el Ebro de Belgrano y Entre Ríos y otros negocios en los que mantiene inversiones. Un informe comercial al que accedió este diario sostiene que es socio de Sarmiento SRL, un café, bar y parrilla ubicado en Alsina 1495, de La Perla SA, dedicada a las operaciones inmobiliarias en Rivadavia 6900, Ríos Seoane SA, del mismo rubro, en Sáenz Peña 636, Impresora Silvia SA, dedicada a la industria gráfica en Estomba 36 y también figura como presidente de la Asociación Gallega de Beneficencia y Mutualidad ubicada en avenida Belgrano 3141.

Las salidas semanales de Ríos Seoane en un Citroën Zara de color rojo que conduce Loureiro no se compadecen con la imposibilidad de concurrir a los juzgados que requirieron saber cuál era su estado de salud en todos estos años. Ahí cobraría lógica lo que sostuvo el abogado Antonio Liurgo sobre la alegada incapacidad mental del empresario de 73 años. “La estrategia es como la que utilizó Pinochet; no es más que un ardid”, señaló cuando patrocinaba a Julia Cabrera, la viuda de Ignacio Torres, el directivo del Deportivo Español asesinado en julio de 2004 y cuyo crimen se atribuyó a un encargo de Ríos Seoane.

Aquella impresión del abogado se vincula con la sensación que experimentaron dos mujeres cuando visitaron al ex dirigente de fútbol en Cohabitam este año. “Se acordaba de varias cuestiones del club, aunque en un momento dijo que no quería hablar más”, recordó una de ellas, que colaboraba en un libro de investigación sobre el asesinato de Torres.

Las sospechas de que Ríos Seoane no estaría tan loco como se le atribuye carecen de base científica, pero se extienden a personal que pasó por el instituto de la calle Humahuaca 4175 del barrio de Almagro y que alimentó la investigación de este caso. En cambio, hay forenses que a requerimiento de la Justicia describieron al paciente con “un cuadro de origen orgánico de carácter evolutivo progresivo y pronóstico irreversible” y que recomendaron “para su padecimiento” a Cohabitam, como el centro de internación adecuado. “Es alienado mental”, sostuvo uno de los médicos que lo atendió para elevarle un informe al Juzgado de Instrucción N 49.

Como fuere, el paciente volverá a ser sometido a más estudios y diligencias si prospera una nueva presentación de Cabrera de Torres. La viuda del dirigente opositor a Ríos Seoane que murió después de sufrir un atentado donde lo prendieron fuego, todavía lucha para que se reabra la investigación judicial. Pasaron catorce años del crimen y quiere que se haga justicia.