Desde Mar del Plata

De a poco, el estadio del Polideportivo Islas Malvinas, donde se jugará la final de la Copa Davis entre la Argentina y España, se va poniendo a tono con las obras de remodelación. El piso de madera que se utilizará como base para la carpeta sintética ya se instaló. Algunas butacas ya fueron colocadas y en otras zonas de la cancha se pusieron los soportes para los demás asientos, que permitirán alcanzar la capacidad mínima requerida (12 mil espectadores) por la Federación Internacional de Tenis. Además, se mejoraron los vestuarios, la sala de prensa, y continúan realizándose algunos trabajos de iluminación. Sin embargo, pese a todo lo que se avanzó, alrededor de cien personas trabajan día y noche para cumplir en tiempo y forma con las obligaciones que estipuló la Federación, que solicitó que la obra esté concluida, por lo menos, una semana antes de la se-rie final.

De todas maneras, desde el Consorcio de la Copa Davis aseguran que llegarán sin problemas. Tanto es así que, por cómo vienen avanzadas las obras, en el transcurso de la próxima semana confían en que estará casi lista la cancha. Algo que no parece alocado ya que –según pudo ver este cronista en una visita al estadio– sólo resta que peguen la carpeta sintética a la base de madera flotante que ya fue colocada. Y luego falta completar detalles, como líneas de marcación, la colocación de la red, bancos de descanso y la silla del umpire (que ya está en el Polideportivo desde hace algunos días junto con los carteles oficiales).

Donde se pudo ver que los arquitectos y obreros no tienen una tarea sencilla es en la ampliación de la capacidad del estadio, que con las refacciones llegará casi a duplicar la cantidad de asientos (de 6500 a 12 mil). Para eso, ya se colocaron algunas butacas extra en las tribunas superiores y medias, y además se continúan poniendo más asientos hasta casi el borde de la cancha. Pero todavía en ese aspecto “resta poco más del 40 por ciento de la obra”, según reconoció a este diario el presidente del Consorcio Copa Davis, Eduardo Pezzatti. “Sin embargo, se llegará sin problema ya que hay gente trabajando las 24 horas del día”, remarcó.

Así, se va poniendo a tono el Islas Malvinas, que ya tiene finalizados algunos detalles estéticos, como los referidos a las escaleras externas de emergencia, los vestuarios y la sala de prensa. Mientras, quedan poco menos de tres semanas para cumplir con los plazos. Pero de la manera en la que se está trabajando, los marplatenses llegarán con todo listo para vivir una gran final.