Ambos funcionarios firmaron en Santiago un acuerdo que permitirá agilizar los trámites para trasladar a los ciudadanos condenados a cumplir la pena en su país de origen, a través de procedimientos seguros que aprovechan al máximo las nuevas tecnologías.

Se trata de un protocolo modificatorio del denominado Tratado de Traslado de Condenados y Cumplimiento de Sentencias Penales, que instaura un sistema de contacto directo entre los ministerios de Justicia de cada país y no implica la utilización de la vía diplomática.

Según Alak, es una "medida humanitaria, de aplicación inmediata, que otorga a los ciudadanos de ambos países el derecho a cumplir o concluir el plazo de su condena en un establecimiento penal de su nacionalidad".

El titular de la cartera de Justicia nacional agregó que se instrumentará "mediante un trámite ágil y directo, destinado a favorecer los vínculos familiares y el respeto a las pautas culturales de cada país". Así, "se acortan los plazos para los traslados que, hasta hoy, incluían un engorroso y burocrático cruce de notas e información escrita entre los ministerios de Relaciones Exteriores y Justicia de cada país".

Por otro lado, Alak recordó que "este protocolo va en el sentido de la más avanzada legislación internacional en la materia. Hoy podemos exhibirlo como un logro para la justicia y el derecho internacional en la región".

En la misma sintonía, Bulnes justificó la necesidad del entendimiento al afirmar que "no se puede extender la condena a los familiares de los condenados".