Cristina, acompañada por el presidente saliente, su esposo Néstor Kirchner, envió un "saludo muy grande para todos, todo el afecto, cariño, amor", al tener un breve contacto con los medios durante la jura del mandatario provincial, mientras era abrazada por decenas de presentes en la ceremonia.

En respuesta a los periodistas, dijo encontrarse, a horas de asumir la jefatura del Estado, "como siempre, trabajando, que es lo que siempre hemos hecho, y lo mejor que sabemos hacer".

De buen humor, la hasta hoy primera dama y senadora nacional aceptó sacarse numerosas fotos con los presentes, familiares y allegados de ministros, intendentes y diputados locales, que acababan de jurar para la nueva gestión de Peralta.

La senadora fue aplaudida por los presentes, cuando Peralta mencionó que, ya como presidenta, participaría de la firma de obras en la provincia, mientras que al descender del escenario, fue cálidamente abordada por los presentes.

Mientras tanto, el presidente actual también se acercó a los saludos efusivos de los santacruceños, pero evitó toda declaración a los medios que cubrieron el acto en el polideportivo de Río Gallegos.

Precisamente Kirchner, en declaraciones publicadas hoy por un matutino, adelantó que se alejará de la "escena pública" para dejarle el protagonismo a quien ejercerá la jefatura del Estado en los próximos cuatro años.

Los Kirchner habían llegado anoche a Río Gallegos, según se informó, y se hicieron presentes en el Polideportivo Boxing Club, donde se realizó el acto, cerca del mediodía, cuando se dio inicio a la jura de las autoridades.

Habitualmente coqueta, Cristina se presentó con un vestido de color rojo llamativo, mientras que el Presidente lo hizo con su habitual traje cruzado y corbate celeste.

Ambos se ubicaron al lado de Peralta, sobre el escenario desde el cual el gobernador -que había asumido ante la renuncia de Carlos Sancho- dirigió un encendido discurso a los presentes.

Fuente: DyN