La curtiembre, ubicada en Jáuregui, a 7 kilómetros de Luján, es propiedad de capitales italianos y fue clausurada por la Municipalidad tras reiteradas denuncias de los vecinos del barrio por el fuerte olor que despedía la planta.

Daniel Sapia, del Sindicato del Cuero de Morón, indicó al canal TN, que uno de los manifestantes resultó herido de bala cuando un hombre "tiró contra la gente". "En ningún momento hubo disturbios de nuestra parte ni de la Policía", aseguró Sapia.

El sindicalista sostuvo que "esto es una curtiembre y olor siempre va a haber", pero remarcó que la planta "cumple con todas la normas que rigen en la provincia de Buenos Aires".

"El olor es problemático sacarlo. Pero tampoco se pueden cerrar 600 fuentes de trabajo. Hay que buscar un punto de inflexión, para que los compañeros trabajen en paz y la gente no tenga olores en el barrio", sostuvo Sapia.