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Junto con Westwood administró la tienda de moda Let it Rock en Londres, a la que luego convirtió en "Sex", que le sirvió para darle nombre a los Pistols. Malcolm McLaren era un gran estratega pop, capaz de instalar la moda punk entre los jóvenes de todo el mundo, como en los `70 lo hizo con el glam, luego de su vinculo con los protopunks neoyorkinos New York Dolls.

A mediados de los `70, y mientras los Ramones habían instalado la semilla del punk con su primer disco, McLaren recibía en su tienda a los jóvenes Johnny Lydon, Steve Jones y Paul Cook, además de un cuasi nerd como Elvis Costello. Con ellos y el bajista Glenn Matlock formó los Sex Pistols, un grupo de chicos que apenas podían tocar sus instrumentos, pero a quienes vistió y les diagramó una campaña publicitaria que los llevó al estrellato.

McLaren le dio forma al "Do it yourself" al dejar de lado la mala calidad musical de los miembros de la banda e instalarlos en los comentarios de todo el Reino Unido y Europa, por su postura escandalosa y sus comentarios vulgares.

Con el primer disco editado "Never Mind The Bollocks", McLaren junto con el cantante Lydon decidieron echar a Matlock y colocaron en su lugar a Sid Vicious, que era el prototipo del punk y que se vestía con las ropas que les daba el diseñador.

La banda se disolvió en 1978 luego de una caótica gira por Estados Unidos y luego de que se editara la película "La Gran Estafa al rock and roll". McLaren terminó profundamente enemistado con Lydon, pero se llevó a Jones y a Cook a Brasil para reunirlos con el ladrón Ronald Biggs.

Luego McLaren se hizo cargo de la corta y malograda carrera solista de Vicious, regresó a Londres para crear el grupo Adam and The Ants y, más tarde, el combo teen pop Bow Wow Wow. En los `80, McLaren decidió incursionar el mismo en la música y grabó unos discos considerados trascendentales para la world music, al mezclar música africana, con reggae, electrónica y funk con los discos "Duck Rock" y "París" (1995). Luego se dedicó al diseño gráfico y a las artes plásticas que lo trajeron a Buenos Aires en el 2008, para participar de la feria ArtBa.